jueves, 18 de septiembre de 2014

EL MEJOR PEOR MOMENTO DE LA VIDA DE NACHO MIRÁS

(Comentario difundido en el programa <Voces de Galicia>, que dirige Isidoro Valerio en Radio Voz, el  17 de septiembre del 2014)


Nacho Mirás es un periodista de los de siempre. Huele la noticia a kilómetros, la persigue, la conquista y la cuenta como nadie. Pero, además, es un hombre de 42 años, con dos hijos y un bien ganado prestigio por el oficio que ejerce en La Voz de Galicia y enseña en la Universidad de Santiago. Acostumbrado a exprimir el reloj cada día para atender al periódico, la universidad y, además, encontrar tiempo para criar a sus hijos, a Nacho el reloj se le paró de repente hace unos meses, cuando le dijeron que tenía un tumor cerebral.
En vez de arrugarse, ha enfrentado al cáncer de la forma que mejor sabe, contándolo, con ese estilo que hace que el lector crea que escribir como él es facilísimo, y la retranca que el tumor no ha logrado quitarle. Y así, en su blog, Rabudo.com, lo bautizó como Casiano, que fue _dice_ <un inquilino de renta antigua muy hijo de puta que le amargó la vida a mi familia>. Y cuando supo que era maligno, también lo contó: un astrocitoma anaplásico grado III. Y las sesiones de radioterapia eran para Nacho visitas a la freidora radiactiva Siemens Primus. La ingesta nocturna de las dosis de quimio, algo que se puede tomar con gaseosa.
Nacho ha conseguido que seamos miles los que seguimos su blog y que, además de emocionarnos, no podamos evitar la sonrisa o la carcajada. En ese blog Mirás cuenta la delicada intervención de neurocirugía en que le extirparon el tumor como que le tunearon el disco duro, critica la burrocracía que le hacía ir a renovar su baja cada semana aunque se sabía que iba a durar meses, o denuncia que el cáncer se sigue comunicando mal y pone como ejemplo <el revuelo que se arma cada vez que, como Sandra Ibarra o yo mismo _dice_, alguien sale del botiquín de la oncología reventando la puerta a patadas>.
Convertido, como también dice él, en una celebrity oncológica, Rabudo.com, ha recibido el premio al mejor blog en español otorgado por el diario 20 minutos. Y a los que aun no lo sepan, tenemos que contarles que ese blog se ha convertido ya en un libro, titulado <El mejor peor momento de mi vida>. Se puede encontrar desde ayer (16 de septiembre) en las librerías o en formato digital, y será presentado mañana, jueves, (18 de septiembre) en Santiago, dentro de unos días en Vigo y luego, seguro, en otros muchos lugares.
Será el primero. Porque, como Nacho sigue contando como le va ganando la batalla al cáncer, habrá más. Seguro. Porque, además, interesa y ayuda a muchos. <En ningún momento _asegura_ me olvido de lo que hay, de lo que puede haber… El temor a no llegar al alumbrado de Navidad o a no poder ver la cabalgata de Reyes en la Plaza del Castillo de Pamplona siempre cansa>.

No hay ni un gramo de inconsciencia. Solo mucho valor, una forma de escribir que conquista al lector más escéptico, y un humor a prueba de cáncer.

miércoles, 17 de septiembre de 2014

ALLARIZ, VEINTICINCO AÑOS DESPUÉS

(Comentario difundido en el programa <Voces de Galicia>, que dirige Isidoro Valerio en Radio Voz, el  10 de septiembre del 2014)

Allariz está celebrando el vigesimoquinto aniversario de aquella revuelta popular que provocó un vuelco en la historia del municipio. Un centenar de truchas muertas en el río Arnoia motivaron un encierro en el Ayuntamiento que iba a durar unas horas, pero acabó prolongándose meses y provocando la dimisión del alcalde y el equipo de gobierno.
El Allariz de hoy se parece, afortunadamente, muy poco al de hace 25 años. Lo que nació como una protesta medioambiental se convirtió en punto de inflexión y aquella villa en decadencia inició una sorprendente recuperación. La clave estuvo en un gobierno municipal que, más allá de las siglas, se planteó el objetivo de colocar al municipio en una senda de desarrollo sostenible, con dos claves muy claras: tener muy en cuenta la historia y las características de Allariz y contar en todo momento con la opinión y la participación de sus vecinos. Las asambleas que se celebraron durante el encierro para informar y decidir los pasos a dar se convirtieron en herramienta habitual de gestión del nuevo gobierno municipal.
La recuperación del río Arnoia fue el primer paso. A la limpieza de sus márgenes con la colaboración vecinal siguió la recuperación de antiguas fábricas o molinos fuera de uso para convertirlos en museos o locales de hostelería. El gobierno municipal del BNG no tuvo reparo en negociar convenios con distintos propietarios para convertir al río en un lugar atractivo para el turismo.
Siguió un complejo proceso de rehabilitación del casco histórico de la villa. En este caso, los convenios fueron con las administraciones autonómica y central para lograr el milagro de restaurar cerca de 600 inmuebles e invertir diez millones de euros. También aquí hubo convenios con propietarios de bajos para restaurarlos y buscar quien estuviese dispuesto a iniciar en ellos actividades comerciales. Esta fórmula ha seguido usándose para iniciativas tan originales como el centro outlet. Su puesta en marcha ha convertido una de las calles del casco antiguo alaricano en una sucesión de tiendas de conocidas marcas con precios rebajados. Se ha convertido en un nuevo atractivo turístico de una villa que ha multiplicado su oferta hostelera, además de haber logrado una modesta, pero no desdeñable industrialización.
El milagro Allariz ha sido posible por un gobierno municipal, que se marcó objetivos claros y trató en todo momento de implicar en ellos a sus vecinos. Parece el abc de la gestión municipal, pero no debe de ser tan fácil cuando hay tan pocos milagros Allariz en nuestra tierra. Ahora que estamos a punto de entrar en una nueva campaña de elecciones municipales no está demás recordárselo a los candidatos. Si lo del programa y la participación vecinal sigue en pie después del día de las elecciones, se consiguen resultados de los que disfrutan todos.